LA DUDA

 

Estaba yo cursando segundo primaria, cuando tuve mi primer duda con castigo, es de saber que en mi época de estudiante, los profesores nos castigaban utilizando una tabla con la que nos goleaban las manos cuando cometíamos algún desorden o cuando dábamos mala respuesta oral a una pregunta. Recuerdo que estábamos en los exámenes finales y ese día me tocaba el examen (oral) de matemáticas, como nunca me prepare y estudie la tabla del 7 y las del 9 que eran para mí  las más difíciles, deje de lado la tabla del 5 y las otras que ya me sabia según yo.

 

Al llamado del profesor salí al frente un poco nervioso e inseguro ya que los nervios bloquean el correcto accionar del cerebro, una vez al frente el profesor me pregunto: Domínguez ¿Cuánto es 5x 8? inmediatamente y con gran seguridad le respondí: 40 profesor, después de mi respuesta hubo otra inesperada pregunta con un tono dudoso y fuerte ¿Comooo?  Replico el profesor. Ese grito fuerte y acompañado con ojos de incredulidad me hizo dudar y en el momento  creí estar equivocado y sin pensar volví a responder: 45 profesor, mi respuesta apresurada me lleno de duda e inseguridad y aturdido vi como el profesor sacaba la tabla mientras tomaba mi mano y me dijo: Por dudar, venga para acá y me dio un tablazos, pero me coloco la máxima nota, un 5 por haber respondido bien. Son cosas que te marcan en la vida y quizás el método no haya sido el correcto, pero funcionó porque nunca más dude que 5x8 sea 40.

 

La DUDA es un mal que junto a la INCREDULIDAD  destruirá tu vida espiritual, trayendo como consecuencia final la perdida de tu alma. La DUDA no es incredulidad, pero puede llegar a serlo, muchos creemos en DIOS y eso nos da un estatus de creyentes, pero la mayoría de las veces alimentamos nuestra creencia con enseñanzas vanas e inertes, adquiridas o impuestas por un sistema religioso tradicional que está lejos de agradara DIOS.  La duda trae consigo otro mal llamado TEMOR y el TEMOR te conduce al MIEDO y el miedo a perder tu originalidad personal y tu seguridad ante DIOS.

 

Ese principio básico debería guiar nuestras reflexiones cada vez que toquemos este importante asunto relacionado con la duda, de ahí la importancia de profundizar por nuestros propios medios y apoyados en la PALABRA DE DIOS para salir de DUDAS en todo aquello que tenga que ver con nuestra relación directa con nuestro creador.

La DUDA es normal que este dentro de la fe, y es bueno expresarla ya que eso nos induce a despejarla y a vivir más confiados cuando esta llegue a entrometerse en nuestra vida espiritual.

 

Hoy millones de personas en todo el mundo dudan de la existencia de DIOS y otros millones dudan del UNICO medio que existe para llegar a EL. Déjame decirte que no es por medio de religiones u obras que se logra llegar al PADRE creador de TODAS las cosas, es a través de su HIJO amado JESUS CRISTO que lo logramos,  lo demás son solo artimañas del enemigo para mantenerte en una falsa creencia e ignorancia.

 

Se aproximan eventos muy catastróficos para la humanidad, los cuales llevaran a aumentar la duda en los incrédulos e  incluso a los verdaderos cristianos, quienes dudaran de la capacidad de DIOS para salvar al ser humano de tanta calamidad por venir.

 

Mateo 24:13Reina-Valera 1960 (RVR1960)

¹³ Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo.

¿Cómo serán los días de aquellos que viven rindiéndole culto a su duda? Difícil situación pero es ahí donde se prueba la verdadera fe, no existe otro método, es bajo presión que logramos certificar nuestra posición ante DIOS, Abraham al obedecer a DIOS (Cuando iba a sacrificar a ISAAC) le demostró que estaba dispuesto a lo que fuera para agradarle y no dudo un segundo ante la orden de su amado CREADOR, pero muchos de nosotros hoy con una pequeña  pruebita ya queremos morirnos.

 

Muy pronto tu DUDA te llevara a morir por CRISTO, no habrá otro camino si te quedas del arrebatamiento de la iglesia, (evento que está próximo a suceder), solo muriendo por EL lograras acceder a tu salvación eterna que estará asegurada con tu firme y decidida actitud de morir por EL así como EL murió por ti. Por lo anterior te invito a ordenar tu casa y tomar una decisión YA.

 

La DUDA es causada por nuestra debilidad y fragilidad humana, el pecado la trajo consigo y aún permanece en nosotros. El ser humano natural carece de elementos que le den la seguridad para confiar plenamente en DIOS, de ahí que constantemente anhele tener certeza en todas las áreas de la fe que profesa y busca evidencias visibles, olvidándose que el significado de la fe es creer en lo que no se ve.

 

Hebreos 11Reina-Valera 1960 (RVR1960)

 

11  Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.

² Porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos.

³ Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía.

 

La DUDA desaparece momentáneamente cuando te entretienes en tu trabajo o cuando te diviertes, en esos momentos; ella se oculta mientras esos momentos distractores te consumen las horas del día, pero sabemos que no todo es trabajo y placer y que en cualquier momento del día o de la semana, vamos a ser tocados con los inevitables momentos difíciles ya sea a título personal o grupal y es ahí donde ella apareceré enseñoreándose de nuestra vida.

 

Pero el problema va más allá y sin duda alguna, la DUDA nos ayuda a fortalecer nuestra fe. La fortaleza a este misterio de la DUDA, se da una vez creemos ser autónomos y autosuficientes, con ello nos vamos a dar cuenta que los pensamientos nuestros no son los de DIOS y en ese ir y venir de la vida, (La mayoría de las veces desordenado) es cuando absorbemos la DUDA en toda su dimensión. Sin embargo, mientras estemos en esta tierra, será muy difícil llegar a la certeza absoluta de una fe inquebrantable.

 

Podemos estar seguros de que 5 x 8 = 40, pero, ¿Va eso a cambiar tu vida? ¿Te dará eso una razón de vivir y una esperanza al enfrentar los problemas cotidianos y la muerte? Creo que no, porque esta seguridad es mecánica y la de DIOS es vivencial, y esto no sólo les sucede a los no convertidos también a muchos cristianos que llevan años en los caminos del SEÑOR.

 

La creencia atea de que no existe un DIOS es un asunto de fe, mas no de la DUDA, así  como lo es el que tú creas que DIOS sí existe. Esta situación es creada en nuestra mente por efectos naturales, sin embargo somos nosotros los que decidimos tomar una decisión de creer o no, pero estoy seguro que la verdadera respuesta la vamos a encontrar en el tiempo, donde la mayoría de las veces es demasiado tarde.

Y no sea que te suceda lo mismo que le sucedió a la persona que no sabía leer el reloj de pulso, y se compró uno y cuando le preguntaban por la hora él le mostraba el reloj y le decía convénzase por usted mismo.  

 

La DUDA también aparece por nuestra falta de humildad. Todos nos vemos tentados a creer que SOMOS INFALIBLES Y LO SABEMOS TODO, como no tenemos respuestas a las preguntas difíciles de la fe, nos cohibimos de preguntar y cuando lo hacemos buscamos el momento propicio y quizás con la persona menos indicada.

 

Muchos cristianos caen en la trampa de suponer que la fe y la DUDA son mutuamente excluyentes. Ellos se imaginan que un verdadero creyente nunca pondría los fundamentos de su fe en tela de juicio y si este experimenta DUDA, su fe no es verdadera. Pero esto dura hasta cuando somos sometidos a fuego purificador. Abraham y Job podrían hablarnos de ello.

Otras veces cuando somos confrontados con argumentos en contra del verdadero Cristianismo, somos arrojados a un mar de dudas, creyendo que todas las objeciones plausibles deben ser contestadas antes de que ellos puedan descansar en su fe. Esta actitud deja entre ver que no leemos la PALABRA de DIOS y por ello nuestro argumento de refutar el cuestionamiento se hace difícil.

 

Junto a CRISTO la DUDA desaparece, sin embargo es hasta que le tocamos; que ella realmente desaparece, esto le pasó a TOMAS. Debemos aprender a relajarnos con las dudas. La DUDA es como un niño que busca atención, mientras más atención le prestes, más atención demandará. Al preocuparte por tus dudas, quedarás atrapado en un círculo vicioso de incertidumbre que te lleva  a tomar malas decisiones y por ende a dar respuestas apresuradas no convincentes.

Por lo tanto, ¿Cómo puede la duda convertirse en incredulidad? La incredulidad es la decisión de vivir tu vida como si DIOS no existiera, la DUDA aflora y se hace visible cuando tienes problemas, antes no. Rechazar a JESUS CRISTO es una decisión deliberada que se genera en tu alma; allí el diablo la opaca cuando estás bien, pero te la saca a flote cuando estas mal, es ahí cuando nuestra fe que proviene de DIOS sale a pelear por nosotros, pero la mayoría de las veces no la dejamos y por eso caemos rendidos ante ella sin lugar a duda.

Pero la DUDA es algo totalmente diferente a la fe, esta es un anhelo melancólico que genera seguridad en las cosas que vemos y en las que supuestamente creemos, mas no en las que no vemos. Pero no es, ni está obligada a ser un problema. El simple hecho de que no pueda probar mi fe en DIOS no implica que dicha fe sea incorrecta. Y sino expreso la DUDA esta acción pasa desapercibida.

Sin embargo, la incredulidad puede llegar sigilosamente en los momentos de DUDA y apoderarse de nuestro ser, conduciéndonos por el camino que te llevara al mismo infierno.

 ¿De qué manera actúa la duda? Ella primero te desestabiliza y te lleva a tomar el camino mental equivocado y una vez estés en ese camino, vas a ver varios atajos que te harán dudar si vas por el camino correcto o por el incorrecto.

El SEÑOR JESUS fue tentado y NUNCA DUDO de que DIOS estaba con EL y esto lo llevo a ganarle  a Satanás el intento de desestabilizarlo.

Quizás refutemos este ejemplo diciendo que CRISTO es el hijo de DIOS y por eso estaba seguro de sí mismo y pudo vencer, pero difiero de ese concepto ya que EL en ese instante estaba en condiciones humanas difíciles y vulnerable al ataque sutil de Satanás, EL SEÑOR JESUS  pudo haber dudado si su fe en DIOS no hubiese estado bien cimentada, EL en ese momento estaba pasando por una fuerte prueba y podría haber cambiado de parecer una vez la DUDA hubiera entrado en EL.

La DUDA en un cristiano podría hacer que no venciera y adquiriera de manera gratis (Por gracia)  las promesas divinas confirmadas en la PALABRA de DIOS  y selladas a través de la muerte y la resurrección de CRISTO. Por eso es importante limpiar la casa de toda esta suciedad que contamina nuestro ser interior y se exterioriza al expresarlo.

Mientras más te preocupes de tus dudas el diablo se enseñoreará de ti y menos mirarás a DIOS. La DUDA se convertirá en incredulidad una vez tú se lo permitas, no existe otro medio, por eso te invito a fortalecer tu vinculo personal con el SEÑOR y veras como poco a poco la DUDA se va alejando de ti y cuando esta se aleja, tu seguridad y dependencia de DIOS es TOTAL y esto sí que le AGRADA a EL.

Alimenta tus dudas y tu fe se morirá de hambre, pero alimenta tu fe y las que se morirán de hambre serán tus dudas. TOMA YA UNA BUENA DECISIÓN Y ENTREGATE A CRISTO donde estarás SEGURO. ¿Por qué esperar la tribulación para hacerlo?, tu DUDA te llevará a grandes sufrimientos que si eres inteligente obviaras.

La incredulidad llega a través de varias rutas posibles:

Primero, a través de una actitud poco realista hacia la fe. Si crees que puedes o necesitas saber todo con una certeza absoluta, tu fe estará en dificultades muy pronto. ¡Pero la fe no es así! La fe se trata de estar dispuesto a vivir confiando en la existencia y en las promesas de DIOS, sabiendo que un día esa existencia y esas promesas serán totalmente reivindicadas y tuyas. Pero por el momento, andemos por fe y no por vista, esta nos podría engañar.

Segundo, la incredulidad puede llegar a través de una preocupación excesiva por la DUDA. Llegas a estar tan obsesionado con tus disposiciones mentales y emocionales que, al final, DIOS queda fuera de tu vida. ¡Dale un respiro  a la DUDA! ¡Mira hacia fuera, no hacia dentro! Contempla la creación y las promesas de DIOS; disfrútalas, saboréalas; acéptalas. No sigas permitiendo que las dudas dominen tu vida. La DUDA, correctamente percibida, es sólo el lado más oscuro de la fe; redescubre el «lado más soleado de la duda» el gozo de la fe en sí misma.

Tercero, Sin importar tu edad, la incredulidad puede llegar a través de una fe inmadura, una fe que se niega a crecer, esto es inmadurez espiritual. Una fe débil es vulnerable y es necesario que te decidas alimentarla diariamente con la PALABRA DE DIOS, porque si no, esta morirás de anemia espiritual.

Tanto la fe es débil, como la DUDA es fuerte cuando una persona tiene poco conocimiento de la PALABRA de DIOS,  no se puede arreglar un ordenador sino entiendes cuáles son sus integrados o partes, podríamos llegar hasta destaparlo, pero que lo arreglemos, lo DUDO mucho. Hoy millones de personas tienen una BIBLIA en su casa, pero pocos la leemos, entonces como podrás darle vida a tu fe, ¿si no la alimentas?

El proceso de maduración de un cristiano; no se da de un día para otro, esto implica profundizar nuestra comprensión de lo que creemos y pasar por muchas pruebas que ayudan a fortalecer nuestra fe. A medida que crecemos en edad, debemos profundizar en la comprensión de nuestra fe. Pero podría darse que pasando los años en el cristianismo, solo crezcamos en edad mas no en la fe y eso podría ser grave, ya que con ello, nos sobre vendrían muchos dolores de cabeza y la vida de un verdadero creyente debe estar llena de libertad y del poder del ESPIRITU SANTO.

Las cosas que nos molestaban siendo jóvenes en la fe, al crecer ya no nos molestan tanto. De hecho, si me permiten hablar desde la experiencia personal, ahora me doy cuenta de que la mayoría de mis propias dudas iniciales simplemente reflejaban mi incomprensión de la fe. A medida que crecí en edad y en la fe, llegué a ser más entendido, cosa que logre  a través de la lectura, de la reflexión, y escuchando predicas de sana doctrina y leyendo libros cristianos.

Refuerza la fe con entendimiento casi tal como reforzarías el concreto con acero. Juntos, pueden soportar mucha más carga de la que podrían resistir por separado.

¿Cuándo la duda se convierte en incredulidad? Solo existe una respuesta a esta pregunta y es: Cuando tú se lo permites, aferrándote a ideas poco realistas sobre la fe que prácticas, y te obsesionas desesperadamente por alimentar tus dudas que son parte natural de la vida del cristiano principiante, o cuando no permites que tu fe crezca.

Todas estas trampas pueden evitarse, cuando le permites al ESPIRITU SANTO que gobierne tu vida y te guie por sendas de justicia. No te avergüences de tus dudas porque esto podría mantenerte en una seguridad vana que trae como consecuencia fatal, la perdida de tu alma. Hablar de las dudas con cristianos que realmente hayan vivido su cristianismo y se consideren más maduros que los principiantes, puede ser que te sirva ya que esta acción se podría comparar con una válvula de seguridad vital para detener la acumulación de esa energía que impulsa la duda, energía que podría, finalmente, convertir la duda normal en una incredulidad desesperada por falta de resultados.

De todos los pecados que cometemos, la duda es el más detestado por DIOS Según el Antiguo y el Nuevo Testamento, nuestras dudas agravian al SEÑOR, lo provocan, le causan mucho dolor.

Vemos un gran ejemplo en el antiguo Israel, después que DIOS libertó a su pueblo de las manos de Faraón. Aquí la DUDA es más fácil de cuestionar ya que con semejantes sucesos vistos de primera mano, el pueblo de Israel al presentársele la prueba, dudaba.

Hoy entendemos que todo esto fue permitido por DIOS para ir creando confianza en su pueblo, confianza que hasta hoy reside en pocos.

El Salmista se lamenta: Salmo 106:6-7 “Pecamos nosotros, como nuestros padres; hicimos maldad, cometimos impiedad. Nuestros padres, en Egipto, no entendieron tus maravillas; no se acordaron de la muchedumbre de tus misericordias, sino que se rebelaron junto al mar, el Mar Rojo”.

 

El escritor está haciendo una confesión aquí. ¿Cuál fue el pecado perverso que cometió Israel? Dudaron que Dios podría seguir liberándolos, aún después que él obró increíbles milagros para ellos en el Mar Rojo y en el desierto.

 

El Salmista nos está pidiendo imaginarnos como el pueblo de DIOS estuvo regocijándose por la victoria al otro lado del mar, pero lamentándose cuando venían días de prueba. Su fe, al igual que la de muchos de nosotros, estaba en proceso de maduración y por eso quizás DIOS tuvo paciencia y misericordia como la ha tenido hoy con su iglesia.

El SEÑOR había realizado uno de los milagros más grandes en la historia de la humanidad, libertando a su pequeño pueblo de Israel de las manos de los poderosos egipcios.

 

Sin embargo, ¿cómo reaccionó este mismo pueblo después ante las situaciones difíciles? Dudaron de la fidelidad de DIOS. Ahora es muy fácil creer y no dudar cuando estás pasando por las maduras, cuando todo a tu alrededor es abundancia y placeres, pero sabemos que todo chorro termina en gota y después de la tempestad viene la calma.

 

El hombre natural da gracias a DIOS después de haber sucedido un evento bueno a su manera de entender, ejemplo le das gracias a DIOS cuando terminas de comer y no antes, Israel canto al otro lado del mar, cuando debió hacerlo antes de cruzarlo. El mundo te dice: El que gana es el que goza.

Por eso DIOS siempre va adelante nuestro y nos recuerda cosas antes que vayan a suceder:

Deuteronomio 8:14Reina-Valera 1960 (RVR1960) 

¹⁴ y se enorgullezca tu corazón, y te olvides del SEÑOR tu Dios, que te sacó de tierra de Egipto, de casa de servidumbre;

Los verdaderos cristianos, no debemos basar nuestra fe sólo en milagros. El ESPIRITU SANTO  nos ayudará cada día que pasa a fortalecer nuestra confianza en el SEÑOR, a través de circunstancias difíciles y pruebas.

Cuando le pedimos a DIOS algo y EL nos lo da sobrenaturalmente, inmediatamente gritamos a gran voz y creemos tener la sartén por el mango, pero cuando no pasa nada el silencio es nuestro mayor aliado.

Es en estos momentos cuando nuestra voz debe retumbar, no debe existir diferencia en ambos estados, ya que en ambos vamos a obtener la victoria y eso debe apartar cualquier duda.

 

Hermanos, el SEÑOR no nos salvó simplemente para que nos calentemos infinitamente en sus bondades, misericordias y gloria. Él tuvo un propósito eterno al escoger a cada uno de nosotros. Y ese propósito va más allá de bendiciones, compañerismo y revelación. El hecho es que el aún quiere alcanzar a la humanidad perdida. Y él está buscando un pueblo creyente y confiado, que él pueda formar en un gran instrumento evangelístico lleno de  CONVICCION y retirado de la DUDA.

 

Nuestro Señor no usa ángeles como testigos de su gloria. Él usa a su pueblo. Y él desea entrenarnos como una especial y “peculiar” generación. Él está buscando probar su palabra en nuestras vidas, para que el mundo crea cuando la proclamamos. Él desea presentar a las naciones incrédulas un pueblo fiel que ha sido conmovido por tiempos duros, quebrantado por pruebas profundas, y aun así continua confiando en él.

1 Pedro 2:9Reina-Valera 1960 (RVR1960)

 

El pueblo de Dios

⁹ Más vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;

 

Te invito a ser un soldado que está totalmente preparado para el campo de batalla. Y sé que la victoria será nuestra antes de que la batalla empiece. Cuando el enemigo súbitamente venga a nosotros, necesitaremos toda la munición que esté disponible. Y esa munición es suplida por la poderosa Palabra de DIOS que yo guardo en mi corazón. Así que, la próxima vez en que el diablo ataque, estoy confiado en que tendré de dónde sacar las reservas. Habré ganado la pelea a solas con DIOS, antes de entra al campo de batalla.

 

¿Es usted un soldado comprometido, creyendo que DIOS te está equipando ahora mismo? Si es así, entonces estarás cumpliendo tres requisitos:

1. Eres un diligente lector de la Palabra de DIOS.

Mientras estudias las Escrituras, estás empezando a comprender cuánto DIOS te ama. Si no estás convencido de su absoluto amor por ti, no podrás superar cualquier crisis que venga. Y serás convencido de su amor solamente devorando su Palabra.

2. Estás cultivando intimidad con DIOS, a través de un calificado tiempo de oración.

Nuestro SEÑOR desea que clamemos a EL en nuestros tiempos de crisis. Pero la oración durante nuestros tiempos duros y difíciles no es suficiente. Tenemos que buscar a nuestros Padre en los tiempos buenos también. Nuestra fe no debe ser ocasional. Tiene su desarrollo en una constante relación con el SEÑOR.

3. Estás confiando que Dios no permitirá que enfrentes ninguna prueba sin darte los medios para soportarla.

Si una gran prueba viene sobre ti, no tienes que preocuparte si serás fuerte o desmayarás. Nuestro Padre da la gracia cuando es necesario. Y si has desarrollado una relación íntima y cercana con él, él derramará su perdurable gracia sobre ti cuando la necesites.

 

 

FARID DOMINGUEZ.